18/05/2024

Consumo de ibuprofeno durante el embarazo es perjudicial para la salud

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Consumo de ibuprofeno durante el embarazo es perjudicial para la salud

Mujeres encinta o que sospechen que lleven un bebé en su vientre deben estar atentas a las recomendaciones de su médico de cabecera. Numerosos medicamentos pueden causar daños durante el embarazo, por lo que no pueden automedicarse bajo ningún concepto.

Expertos en materia de salud pública señalan que el consumo de ibuprofeno durante el embarazo es perjudicial para la salud, sobre todo en los primeros meses, en virtud de que puede afectar el crecimiento del feto.

Alteraciones en el tracto urogenital son visibles en aquellos bebés cuyas madres han consumido ibuprofeno durante el embarazo. Se estima que la sustancia inhibe la actuación de un número determinado de hormonas.

Estadísticas recientes indican que por lo menos el 10 por ciento de las mujeres embarazadas admite haber tomado ibuprofeno en alguna etapa de la gestación. Muchas de ellas no tenían conocimiento sobre esta prohibición o ignoraron las alertas de sus respectivos médicos, a riesgo de causarle daños al feto.

Asma o bajo peso son algunas de las anomalías en el feto asociadas con el consumo de ibuprofeno durante el embarazo. Se estima que el paracetamol y la aspirina pueden hacer tanto daño como el ibuprofeno, en tal sentido.

Accidentes cerebrovasculares

Jóvenes con edades comprendidas entre los 12 y 24 años deben prestar a una importante advertencia formulada por el Journal of the American Medical Association Neurology, reconocido medio de comunicación social del ámbito de la salud. Los embarazos en esa etapa de la vida incrementan las posibilidades de un ACV, sobre todo si no se toman las precauciones de rigor.

Mujeres embarazadas deben prestar atención a su salud, pues son responsables no solo por su vida sino también por la del niño o niña que llevan dentro. Los accidentes cerebrovasculares pueden ser más frecuentes de lo que se cree entre quienes están a la espera de un hijo.

Pacientes que ya han dado a luz no están exentas de ese riesgo. Las posibilidades de sufrir un accidente cerebrovascular disminuyen a partir de los 35 años de edad.

Por La Lupa Digital

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