Enrique Peña Nieto se mete en las presidenciales de Estados Unidos

México tiene mucho que ganar o perder cuando culmine el mandato de Barack Obama. Enrique Peña Nieto se mete en las presidenciales de Estados Unidos, afirmando que alguno de los candidatos podría tener una visión distorsionada sobre la realidad de su país.

Peña Nieto quiere diálogo con Donald Trump y Hillary Clinton

Peña Nieto quiere diálogo con Donald Trump y Hillary Clinton, y por ello le ha propuesto a los candidatos del Partido Republicano y del Partido Demócrata una reunión a puertas cerradas para debatir algunos puntos relacionados con la migración, comercio internacional y seguridad ciudadana.

Hillary Clinton tuvo la oportunidad de relacionarse con Peña Nieto cuando perteneció al gabinete del presidente Barack Obama. El mandatario mexicano afirma que no conoce ni de vista ni de trato a Donald Trump, el abanderado que propone la construcción de un muro entre ambos países con financiamiento de los aztecas.

Estados Unidos ha sido, es y seguirá siendo un aliado importante de México en América del Norte, según Peña Nieto, por lo que no vale la pena que las relaciones se deterioren si, por ejemplo, Trump llega al poder. El magnate inmobiliario dijo que a su país sólo llegan mexicanos violadores  y asesinos, unas declaraciones que no estuvieron exentas de polémica.

Enrique Peña Nieto considera de vital importancia reunirse con Donald Trump, especialmente si comienza a repuntar en las encuestas, porque a su juicio es necesario que el candidato republicano cambie su visión sobre México y los mexicanos.

Trump ha arremetido también contra los musulmanes y diferentes minorías étnicas, como los afroamericanos y los latinos, por lo que hasta ahora sólo tendría garantizado el voto de las personas de raza blanca. El candidato ha recurrido a la estrategia de matizar sus declaraciones ante los medios de comunicación social y la opinión pública en general, a sabiendas de que la radicalización del discurso le puede seguir restando votos.