APRENDE | El bullying y sus consecuencias en las relaciones de parejas
Existe una clara diferencia entre el sentido del humor sano en pareja y el acto de humillar al otro sin tomar en cuenta sus sentimientos
El bullying está en todo tipo de relación, desde amistades hasta relaciones de pareja, y aunque no siempre es ofensivo, siempre genera un impacto en la persona, ya que, a fin de cuentas, constituye un nivel de maltrato psicológico, y en algunos casos, físico.
El psicólogo Danilo Díaz Granados te trae un poco de claridad en las características y propósitos de este tipo de comportamiento.
El bullying en las relaciones de parejas se puede identificar cuando
- existen burlas y críticas sobre el aspecto físico de la pareja.
- control sobre amistades o familiares.
- celos extremos.
- posesión.
- obsesión.
- control de las salidas con o sin la pareja.
- manipulación.
- hostigamiento.
- acoso verbal o sexual.
- prohibición del desarrollo libre de la personalidad.
- insultos.
- amenazas.
- palabras descalificadoras.
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¿Qué se debe hacer?
Si despiertas un día y te das cuenta de que tu vida se está viendo afectada negativamente por tu pareja, con una o varias de las características descritas, debes armarte de valor y detenerlo en el acto y no permitir que esto siga sucediendo.
Durante todo este proceso, debes mantener una comunicación sana con tu pareja. Debes expresar claramente cómo te sientes sobre esta situación y debes tratar de buscar acuerdos, porque si esto no se soluciona desencadenará miedos e inseguridades.
Lo más importante, señala Danilo Díazgranados Manglano, es que debes pensar en ti, valorarte y respetarte. Sólo de esta manera los demás podrán ver todas tus cualidades, presentándote nuevas oportunidades de crecimiento y la posibilidad de un nuevo amor que te valore por lo que vales.
El bullying nunca es sano
El buen humor en una pareja es clave para complementar la felicidad. Les ayuda a enfrentar mejor los problemas y a permanecer juntos más tiempo.
¡Pero ese buen humor es muy diferente al bullying!
Aprovechar al máximo los chistes internos, entender las burlas no ofensivas de tu pareja y saber que no debes sobrepasarte con los comentarios ni tomarte todo de forma personal, es lo mejor que puede hacer una pareja.
Ambos deben ser conscientes de que en la misma medida serán tratados.
